Denuncian vaciamiento en la Secretaría de Derechos Humanos

Fuente: @ateddhhnacion
A más de un año de la asunción de Javier Milei como presidente, organizaciones de derechos humanos realizarán este viernes 27 a las 17 un abrazo simbólico al Espacio Memoria y Derechos Humanos ex ESMA (Av. Del Libertador 8151). La medida busca denunciar el vaciamiento de la Secretaría de Derechos Humanos y los despidos masivos que afectan a cientos de trabajadores.
El ajuste en el área, dirigido por el ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona y el secretario de Derechos Humanos Alberto Baños, se centra en la implementación de un controvertido programa de retiros “voluntarios”. Según denuncias de la junta interna de ATE, este esquema obliga a los contratados bajo la órbita de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), que representa a casi 3000 empleados, a aceptar las condiciones o perder sus ingresos a partir del 31 de diciembre.
Áreas críticas en peligro
El ajuste afecta a más de 600 trabajadores de la Secretaría de Derechos Humanos, incluidos aquellos pertenecientes a la planta transitoria y contratados externos, poniendo en riesgo el funcionamiento de áreas esenciales como:
- Registro Unificado de Víctimas del Terrorismo de Estado (RUVTE).
- Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti.
- Archivo Nacional de la Memoria.
- Gestión de Sitios de Memoria en todo el país, como Automotores Orletti, Atlético, Olimpo y La Escuelita de Famaillá.
Estos espacios son fundamentales para mantener viva la memoria histórica y garantizar el acceso a políticas de Memoria, Verdad y Justicia.
Críticas de organismos de derechos humanos
Organizaciones como Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Abuelas de Plaza de Mayo, H.I.J.O.S., y la APDH, entre otras, emitieron un comunicado conjunto denunciando que los despidos y el desmantelamiento de estas políticas constituyen “delitos gravísimos” que podrían ser considerados incumplimiento de deberes de funcionario público, tanto a nivel nacional como internacional.
“El ajuste no solo destruye los derechos laborales, sino que pone en peligro la continuidad de políticas fundamentales para preservar la memoria histórica del país”, expresaron en el comunicado.
Clima laboral hostil
Desde la llegada de Alberto Baños a la Secretaría, las denuncias sobre presiones y hostigamiento han aumentado. Según ATE, la presión por los retiros voluntarios ha provocado un deterioro en la salud mental de los trabajadores, con el fallecimiento de dos empleados y un incremento en enfermedades psicológicas relacionadas con el estrés laboral.
El abrazo simbólico del viernes busca visibilizar esta situación y exigir la continuidad de las políticas públicas de derechos humanos. Con un contexto marcado por el desmantelamiento de áreas sensibles y la creciente militarización en espacios vinculados al terrorismo de Estado, la convocatoria busca enviar un mensaje claro: la memoria no se negocia.