Crimen de Villa Gesell: Un peritaje complica a Máximo Thomsen
La zapatilla que se usó para golpear a Fernando Baez Sosa pertenece a Máximo Thomsen. Así lo determinó el análisis de la Policía Federal.

La fiscal Verónica Zamboni recibió el resultado de una pericia clave. La zapatilla ensangrentada encontrada en la casa de los diez rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa corresponde a Máximo Thomsen.
El estudio realizado por el Laboratorio Scopométrico de la Policía Federal en Mar del Plata determinó que la marca de la zapatilla estaba sobre el cuerpo de Fernando. La impronta de la zapatilla coincide también con el pie de uno de los principales acusados del crimen.
Hubo otra impresión de calzado que fue detectada, pero era muy pequeña, sin suficiente información para ser atribuida a un pie en particular. Sin embargo, no hubo problemas en detectar el rastro que Thomsen dejó en el cuerpo. La marca era lo suficientemente grande como para asegurar un resultado.
Los pies de los acusados fueron identificados con una técnica que incluye comparaciones fotográficas, lecturas de ondas de luz mediante un videoespectrómetro y el uso de tinta litográfica. Así, Thomsen y sus siete cómplices enfrentan la posibilidad de ser condenados a prisión perpetua.
